5 CaféBar

 

Es un local que abrió hace pocos meses. Tranquilo, hace chaflán (me encanta esa palabra), es discreto y sencillo. Juanvi es el centro de este espacio, hecho a su medida. Cada rincón refleja su persona, como un juego de espejos donde todos los rayos de luz convergen detrás de la barra.

La primera vez que fui fué con mi hermana. Tuvimos una conversación de lo más divertida y recuerdo que durante un momento tuve la sensación de estar en casa. Como si en vez de estar tomando algo en un local estuviéramos en la mismísima casa del dueño. Me encantó. Es precisamente su falta de pretensiones y el ambiente tranquilo lo que hace que quiera volver siempre. No es fácil crear esa atmósfera en un local, por eso éste es tan especial.

En la carta tiene un nombre muy divertido: "matrimonio", la combinación de anchoas y boquerones. Este detalle popular me chifla. Esto es porque tengo debilidad por lo que mis conocidos llaman manías de abuela. Me encantan las bebidas añejas: vermut, ginger ale, anisete, misteleta de la terreta, gin tonic (tan de moda ahora... pero los que lo habéis tomado toda la vida recordaréis la humillación que sufríamos en las barras los entonces no-modernos por pedir una copa de carrozas en la dictadura del vodka-con-naranja y el ron-con-cola). 5 CaféBar combina una decoración moderna y funcional con la carta más pureta, y eso es de agradecer para todos los amantes de las tardes ociosas y cotidianas con los amigos. Que en este país somos muchos. Por eso, lo más de ir a 5 es pedir un vermut de Reus (o vermú, como dicen los mayores) y pasarte un par de horas charlando con tus amigos.

El tiempo se estira y se aligera allí dentro.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

This is a place that opened only a few months ago. It's quiet, placed in a corner and is discreet and simple. Juanvi is the center and the tailor of this space. Each corner reflects him as a mirror game where all the light rays converge behind the bar. 

The first time I went here I accompanied by my sister. We had the funniest conversation and remember feeling as if I were at home. In fact, I felt I was having a drink at the owner's house. I loved it. It is precisely his lack of pretension and relaxed atmosphere that makes me want to come back. It is not easy to create that atmosphere in a bar, so this place is very special. 

The menu has a very funny plate called "marriage", which is the combination of anchovies and "boquerones" (two types of fish one is salty other is in vinegar). This is a traditional dish and the type of detail I really fancy. You know I have a weakness for what I called grandmother's hobbies, such as stale drinks: vermouth, ginger ale, anisette, misteleta, gin tonic (so "in" nowadays, while back in the days I was humiliatied in bars because I was an old fashioned. This was during the dictatorship of vodka-with-orange and rum-coke). 5 CaféBar combines a modern and functional place with somewhat vintage touch. It welcomes all the "lazy afternoon" lovers, which are many in Spain. So, the best of 5 is to come with a friend, order a Reus Vermouth and spend a couple of hours talking with a friend.
 
The time lengthens and lightens in this place.